19 de julio de 2008

Nos olemos


Mis sábanas roban su olor
mi olor, nuestro sudores.
Mi lengua a lametazos la busca
la ansía, la moja.
No es cama extraña
ni antiguos estos ardores.

Pone mis manos en su boca.
su vientre y sus pechos.
Sentada en mi me ordena,
me alienta, me araña,
me pide, me excita,
me arranca los excesos.

Me deja que la muerda
y la marque todo el cuerpo.
Gritamos, llegamos,
se viste y desaparece .
Deja para "sus enamorados"
los momentos tiernos.






Me quedo cambiando la cama y cerrando ventanas.
Llegó hace dos hora y se acaba de marchar después de habernos torturado a placer. Ya lo sabemos, lo nuestro es imposible (inservible) y sin embargo nos buscamos para golpearnos fuerte cuerpo contra cuerpo.

Sabemos que no nos provocamos efectos secundarios, no preguntamos ni nos preguntamos, (tampoco responderíamos), no miramos para atrás ni nos dejamos resaca o remordimientos, tan solo marcas en el cuerpo y manchas en la cama.

Siempre me sorprende con los colmillos afilados y el cuerpo vibrando.
Tengo la certeza de que me huele, esté donde esté y eso no sería un problema si no fuera porque yo también huelo el deseo, las pieles que resbalan ganas de gozar y nos acabamos encontrando al girar una esquina o abrir una puerta.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

hola
saludos
orale que escrito
jejeje
sale pues me retiro ahora si ando sin tiempo

ByE

Esther dijo...

Hola eso es atracción entre esos dos cuerpos,como la del lobo a la luna que la necesita..

Buen escrito,besos

Sombra de Luna dijo...

No tengo palabras para decir lo que he sentido al leer tu texto. Es de las mejores cosas que he leido jamas, prometido. Ha conseguido que sienta ganas de esa última vez, aunque no me convenga...
Lo que mas me ha gustado de todo lo que he leido de ti, sin duda alguna...
MUAK!

Anónimo dijo...

Después de tanto tiempo,
he vuelto ha verte.....
sigues provocando en mí
esa reacción, ese instinto animal
como la luna y el lobo...
pues sí, es una coincidencia o
será el destino que vuelve a cruzar
nuestros caminos,
escribir "nos olemos"
y volver a encontrarnos...
espero que no seas tan caro de ver
muchos besos tontito

Anónimo dijo...

Me ha gustado.
Mucho, además.


S.

Anónimo dijo...

un bonito relato que todos hemos vivido en mayor o medida. Escribes muy bien. Un abrazo.

Lycans Laqueus dijo...

ave, vaya con el tiempo.

esther, el lobo y la luna auuuu je.

sombra, muchas gracias wapa. si no te conviene porque el sentimiento se asoma por el armario, mejor huir.

anónimo, sabes q es complicado encontrarme. Y la tensión sexual que nos tenemos es tan grata porque nunca la hemos visto cumplida. ni la veremos. jajajaja

s, me alegra de que te haya gustado, te sigo de cerca.

fernando, muchas gracias por pasar.

un mordisco en la yugular a tod@s.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Me ha gustado mucho lycans... deseo en estado puro.

Por cierto, me ha recordado (no sé por qué) la pelicula "esencia de mujer", y ese ciego tan maravilloso que tenia un olfato fantástico para el sexo femenino...

Un abrazo.

Anónimo dijo...

waoooooooo, para ser lo primero que leo de tu blog... Sin palabras me quedo.
Es muy bueno de veras... todos lo sentimos alguna vez pero ¿Quién se atreve a describirlo?
Un abrazo.

Ericarol dijo...

ahhhhh el deseo, traicionero pero maravilloso. Beso.

Lycans Laqueus dijo...

Cornelivs, jejeje, cuando nos falta un sentido desarrollamos otro, eso dicen

amig@ mi@, muchas gracias por pasar. Welcome.

ericarol, el deseo no estricionero,jaja, lo somos nosotros.
El deso es solo deseo. no'

un lobo traicionero

xeixa dijo...

me recuerda a mi historia solo buscamos gozar que nuestros sudores se mezclen dejando un rastro que solo las sabanas pueden seguir. Me encanta como lo describes, ese placer, ese gozo sin remordimientos, sin buscar mas que el deseo de disfrutar de verdad que me encanta jejeje
Un beso

Arkantis dijo...

Ufff que buen poema...me identifico y mucho con tu`post
Besos

CalidaSirena dijo...

Que intensos momentos de placer, donde el deseo es más fuerte que la razón...
Me ha encantado..
Besos cálidos

Credendo Vides dijo...

Bueno, creo q todos hemos pasado alguna vez por el deseo del olor (o por el deseo sin más) y nos quedamos, después, haciendo la cama pensando en si salir o no a dar un paseo...
Saludos desde el Inframundo.